Hay dos Bérgamo, una Alta y una Bassa. La Bassa se halla al pie de la colina y es relativamente más moderna. Aquí también estuve unas tres veces, la primera sola, después con mi hija y luego con mi marido.
Casi siempre vine desde Milán que queda a 51 km. Se llega fácilmente por la autostrada.
A Bérgamo Alta se puede llegar en Funicular, evitando así el problema del estacionamiento, o si tienen ganas de caminar pueden hacerlo, hay unos cuantos escalones.
Como toda ciudad sobre una colina, estaba rodeada por murallas que datan del año 1588, de unos 6 kilómetros de longitud. Tenía además cuatro puertas. Cada una se comunicaba con las principales vías de comunicación.
Su origen es medieval y debe su belleza arquitectónica a la influencia veneciana que la gobernó desde el siglo XV hasta fines del siglo XVII.
Con el funicular se llega hasta la plaza del mercado y se accede a la calle Gombito que es la arteria principal, llena de negocios sobre todos de carteras y hermosos zapatos, bares y restaurantes, de vida muy animada, gente elegante y relajada. Luego, a la altura de la Torre Gombito, cambia su nombre por Colleoni, que fuera condottiero (es el líder o comandante) de la ciudad. En esta calle hay muchas pizzerías, pastelerías, vinerías y restaurantes.
Por la Vía Colleoni se llega a la Piazza Vecchia que sigue siendo el centro de reunión social, con un grupo de bellos edificios. La Torre del Comune y su reloj del siglo XII. Un campanario de origen medieval que mide 52 metros llamado Il Campanone donde su campana suena 100 veces todas las noches a las 20, para anunciar el cierre de las puertas, es una de las versiones, la otra más popular dice que es en recuerdo de los soldados de Bérgamo que se unieron en número de 100 a Garibaldi para la campaña Dei Mille. Desde arriba se tiene una hermosa vista de toda la ciudad.
También del siglo XII es el Palazzo della Ragione con una estatua del león de Venecia, y una escalera exterior que suele estar llena de flores.
En el centro de la plaza se encuentra la Fontana Contarini, donada por este a la ciudad en el año 1780.
Imposible no sentarse en el antiguo Caffé del Tasso fundado en el año 1476, antes del descubrimiento de América (1492). Está siempre abierto. Se llamó «La posada de las dos espadas», porque solían batirse a duelo. Tiene el nombre del famoso escritor Torcuato Tasso. Forma parte de los «cafés históricos de Italia».
A través de los pórticos del palacio se pasa a la Piazza del Duomo, la basílica de Santa Maria Maggiore, con la tumba del famoso compositor Donizetti, el baptisterio y la Capilla Colleoni. Se encontrarán en un espacio bastante reducido con estos imponentes monumentos. El Duomo, dedicado a San Alejandro, patrono de Bérgamo, tiene un frente de mármol blanco de estilo neoclásico y su interior cubierto de bellos frescos. Es muy hermoso. En el año 1459 comenzó su construcción, pero pasaron casi trescientos años para que se continuara la obra en el año 1669 y se terminó en el año 1693.
El lugar donde se encuentra, ya en el siglo V había habido dos iglesias, siendo destruidas para distintos propósitos.
El edificio sufrió distintas modificaciones durante el siglo XIX.
A un costado del Duomo se encuentra la basílica de Santa María Maggiore, fundada en el año 1137 sobre una iglesia anterior, a su vez construida sobre un templo romano. Pareciera que una iglesia se superpuso a la otra. Bueno es que no tenían mucho espacio.
El frente de la basílica es de estilo lombardo románico, ricamente trabajada, tanto que parece un bordado. El hermoso portal que parece de un cuento de hadas, se terminó en 1521 y se lo llama Porta della Fontana.
El interior es barroco, bellos tapices flamencos y florentinos cubren sus paredes. También se encuentra la tumba de Gaetano Donizetti, famoso compositor nacido en Bérgamo.
El condottiero Bartolomeo Colleoni, no dudó en hacer demoler uno de los ábsides de la basílica para construir su mausoleo y le pidió a uno de los más reconocidos artistas del momento Giovanni Antonio Amadeo en el año 1470-1472 la construcción del mismo.
El baptisterio es el otro monumento que completa el conjunto de la Piazza del Duomo, ocupa el lugar actual desde el año 1898. Originariamente había estado dentro de la basílica, su origen se remonta al año 1340. Cuando la ceremonia del bautismo se pasó al Duomo quedó inutilizado. De tal manera que en el año 1660 fue desarmado y así quedó hasta el año 1856, cuando se decidió colocarlo frente al Duomo. Es de una arquitectura delicada con finísimos bajorrelieves.
A pesar de lo reducido del espacio el conjunto de monumentos es precioso.
Allí cerca se encuentra el Teatro Sociale, fue inaugurado en el año 1808 pero recién en el año 2009 fue re abierto ya restaurado, cuenta con 1300 lugares y 88 palcos.
Hora de reponer fuerzas, junto con Othmar un amigo que vino a verme desde Milano. Nos dirigimos a la Vinería Cozzi, en Colleoni 22, local simpático de buena comida local, con un curioso y divertido modo de ver los postres a través de un visor.
Por suerte hay mucho para caminar para compensar lo mucho que se come.
Estábamos hospedados en el Hotel L’Agnello D’Oro, en la vía Gombito 22, muy bien ubicado y con estacionamiento. Es de destacar el restaurante por su decoración y la estupenda comida. En el frente tiene pintada una meridiana y está situado en una mini placita con una fuente y a un costado una iglesia.
Allí cerca en Vía Mario Lupo encontraremos un lavadero del año 1891, construido en mármol blanco con un elegante techo, y un buen sistema de drenaje del agua, lo que lo hacía muy funcional.
Para ir hasta el Castello de San Vigilio se puede tomar el funicular en la puerta San Alessandro, desde allí hay unas hermosas vistas. En estas colinas estuvo Hermann Hesse seguramente inspirándose admirando el panorama.
De regreso paré en el hotel Relais San Lorenzo, a tomar un café y gozar de la belleza de la decoración.
Las callecitas son muy lindas y no suele haber mucha gente, aléjense de las calles principales y gozarán de la verdadera vida local..
Otro lugar interesante cerca del Mercato del Fieno es lo que llaman La Roca, es una fortificación que ahora es museo.
Cenamos en el histórico Bar Al Donizetti, Via Gombito 17, que todavía lleva el nombre de Pasticceria Donizetti. Comimos una selección de quesos y fiambres, muy buenos, muy linda la presentación, con un vino tinto Morellino di Scansano, no de los más caros.
En Bérgamo Bassa, bajo las murallas de la ciudad, en la Academia Carrara, se encuentra una de las colecciones más importantes de arte con obras de Canaletto, Mantegna, Tiepolo, Carpaccio y tantos otros. Todas las ciudades y pueblos por pequeños que sean, en esta tierra siempre cuentan con museos, galerías, teatros y lugares históricos.
Aquí solo dimos una vuelta, volvimos Bérgamo Alta, si nunca estuvieron les aconsejo darse una vuelta y no se sentirán defraudados.