Año 2025
Desde el Lago di Braies me dirigí a Risano que queda a 174 km y a 13 km de Udine. Quería alojarme en un agroturismo que quedara cerca. Decidí Al Gelso, que tenía estacionamiento y restaurante con muy buenas referencias. Aquí me quedare 4 días.
El desayuno bufet muy completo y rico. Después de desayunar fui a Udine, llegué muy fácilmente.
Deje el auto en un estacionamiento gratis en la Porta Aquileia en La Piazzetta del Pozzo. Por la Vía Aquileia se llega directamente al casco antiguo y a la Piazza dell Libertà.
Údine es una pequeña ciudad del norte de Italia, de la región de Friuli-Venecia Julia. Se encuentra a pocos km de la frontera con Eslovenia y de Austria.
La ciudad está dominada por una colina sobre la que se encuentra el antiguo castillo, donde ahora están los museos cívicos.
Muchas de las calles del centro histórico tienen pórticos. Cómo casi todas las ciudades del norte de Italia.
La Piazza della Liberta, centro de la vida cívica, es de estilo veneciano y dicen que es la más linda en su estilo en tierra firme.
Hay una fuente de estilo renacentista. La columna coronada con el león emblema veneciano. En uno de los lados el hermoso edificio de estilo gótico veneciano de 1457, la Loggia del Lionello. Algo increíble es que se destruyó por un incendio en el año 1876 y reconstruido fielmente de acuerdo a los diseños originales.
La Torre con el Reloj y la Loggia y el Tempietto di San Giovanni, son preciosos.
Me quedé a almorzar en el restaurante Osteria delle Volte, en Via Mercerie 6, en la esquina del hermoso edificio de la Loggia del Lionello. La comida estaba a la altura del entorno.
De entrada, alcaucil a la judía, luego tagliatelle con una crema de alcauciles y queso parmigiano (se nota que me gustan) y una copa de Prosecco.
Es una ciudad de gente elegante, muy bien vestida. Algunos negocios decorados magníficamente, los edificios de arquitectura moderna bien integrados a la edificación medieval
Mientras degustaba un helado, di una vuelta por las estrechas calles medievales, con hermosos negocios, y llegué a la Piazza Matteotti o Piazza delle Erbe, rodeada de palacios históricos, bares y la iglesia de San Giacomo.
Esta plaza es el centro de la vida social. No había tomado café ni postre, de manera que me acomode a hacer lo que hacen los italianos, con mi cafecito.
Acá no parece que la gente tuviera stres. Es lindo ver a las personas mayores como se quedan horas con amigos, o solos con un café o un aperitivo. También es muy común ver a los hombres de todas las edades haciendo las compras con sus bolsas donde asoman verduras y panes.
Algo que también es frecuente, en los pueblos es que vayan a los campos a recoger lo que llaman hierbas espontáneas, con las que preparan ensaladas, rellenos de pastas y otras preparaciones. Justamente anoche en el restaurante del agroturismo comí un risoto exquisito preparado con esas hierbas.
La ciudad se puede recorrer en pocas horas y si se quiere visitar algún museo o iglesia y visitar la torre del palacio con un día es suficiente.
De regreso para buscar el auto por la Via Aquileia y Via Lovaria, se pasa por la Piazza del Duomo, donde esta la catedral de Santa María de la Anunciación, de estilo románico su fachada y su interior barroco, edificada en el año 1236 y restaurada en 1368.
Sobre la misma vía la iglesia de la Beata Vergine del Carmine, del año 1332.
Me llamo la atención el cartel de una carnicería que parecía una boutique.
Los lugares cercanos para visitar son Spilimbergo, Cividale del Friuli, Grado.