SAVIGNANO SUL PANARO – Emilia Romagna

Savignano sul Panaro

De los lugares cerca de Modena el más recomendado era Savignano sul Panaro, (Panaro es el nombre del rio),  queda a 26 km.  Ya saben porque se los he contado en otros relatos que los italianos hacen kilómetros para ir a comer, y la recomendación especial era  ir a comer a la Osteria Amelia, pero estaba cerrada, preguntamos si había algún otro lugar y nos mandaron abajo al pueblo, a la Cantina Dei Contrari, ubicado en Vía Claudia 3961,  en donde comimos re bien y re barato, y re mucho. Restaurante  antiguo donde van los locales, tenían un buffet muy completo, comimos unas verduras salteadas silvestres  con papas, fiambres y algo más que ya no me acuerdo, de plato principal Eleonora un risotto de remolachas y queso parmigiano y yo “trenette” especie  de pappardelle pero con bordes dentados con salsa de cinghiale. De postre una creme brulee, café, tomamos agua yo tenía que manejar.  Pagamos 34.- E.

Volvimos al casco antiguo, al bar donde nos habían recomendado el restaurante y de paso decidimos seguir hacia arriba para ver algo del pueblo.
Menos mal que fuimos en auto ya que la subida es bien empinada. En la cima había una iglesia pero estaba cerrada. En una zona detrás de la iglesia vimos a un señor y le preguntamos que estaban haciendo y así charlando nos dijo que ya que veníamos de tan lejos nos abriría la iglesia ya que él tenía la llave. Además de mostrarnos la iglesia nos contó la historia del borgo que no habíamos visto. La iglesia recién restaurada en el año 2008, es muy linda dedicada a la Vergine Santa Maria Assunta, la primera iglesia posiblemente construida entre los años 1027 y 1033. Nuestra buena suerte nos seguía acompañando. Con todo lo que nos explicó nos sirvió para hacer un recorrido por el pequeño burgo ya que la oficina de  informes estaba cerrada.
Estando allí vinieron unas mujeres y nos insistieron que fuéramos a Castelvetro. Pero lo dejaremos para otro día.

Este sugestivo borgo medieval ubicado en la cima de una pequeña colina tiene a sus pies la moderna ciudad de Svignano. De origen romana ha sido en gran parte restaurado y hoy es un tranquilo poblado separado del que se halla a sus pies. 

Se ingresa a través de una enorme torre que formaba parte de la muralla defensiva. Siguiendo un poco nos encontramos con un graciosa placita con  un aljibe de forma octogonal, todo muy bien cuidado.


Por la misma vía nos encontramos con una serie de hermosas casas de piedra, en una de ella dice “Casa del Capitano”. Se pueden ver los emblemas de I Contrari, aparentemente Señores de Savignano, que conquistaron el lugar en 1409 hasta 1575, y desde entonces todos los años se recuerda el hecho de la histórica “Lotta per la Spada dei Contrari”.

Subiendo se llega hasta la iglesia  y a la cima del castillo.

Bajamos con el auto pero recorrimos el pueblo de abajo hacia arriba. Pintoresco como todos los pueblos medievales, con el castillo en lo más alto rodeado de viñedos cultivados sobre unas pendientes increíbles.

Estábamos a 11 k. De  Maranello y como no íbamos a ir?

Allí es la cuna del cavallino rampante, del color rojo más deseado y donde lo que se escucha en sus calles es el rugido de aceleración de esas obras de arte que los italianos llaman “la macchina”.  Aqui todo es de color rojo sangre, rojo pasión que le ponen los italianos a esos motores.
Estas bellezas son obras de arte y objeto de deseo, los ojos no se cansan de admirarlas.

Volvimos cansadísimas,  cenamos en el hotel y a dormir ya que mañana iremos a Gubbio
 Modena es un punto ideal para conocer la zona.